Las verdes tierras de Al Ahsa, en la zona este del reino, son Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y albergan uno de los oasis naturales más grandes de mundo. En medio de palmeras datileras, tierras de labranza y manantiales naturales, Al Ahsa esconde lugares históricos que datan del Neolítico. Si pensaba que Arabia Saudí era todo desierto, aquí cambiará de opinión.
Para probar la auténtica comida local, visite Dar Albasmah, que ofrece cocina tradicional saudí con un toque moderno, o el Al Koot Heritage Hotel, donde mujeres de la zona cocinan recetas familiares que han ido pasando de generación en generación.